La epilepsia es una enfermedad en la que las crisis epilépticas recurren, en general, como resultado de una lesión cerebral estructural, en el seno de una enfermedad sistémica o de forma idiopática o genética. Una crisis epiléptica es el resultado de una descarga neuronal cortical excesiva, que puede ser focal, generalizada o generalizarse secundariamente, y que es seguida de manifestaciones clínicas, produciendo un trastorno autolimitado de la consciencia, comportamiento, emoción o cualquier función cortical, dependiendo de la localización y características de las descargas.